lunes, 2 de marzo de 2009

Vivencias del Conejillo (2.1)

2.1 LA MADURACIÓN

En esta segunda sección de la ópera, el valor de la presentación debía de ser más abrupto, más obligatorio que en los otros dos escenarios, que finalmente solo servían de parte aguas para la iniciación de la narrativa.
Aquí empiezo ya a plantear, lo que siempre he tratado de denotar en el resto de mis piezas performáticas, la construcción de panoramas irreales en espacios reales. Y La Maduración no sería la excepción.
Para generar estos parámetros fantásticos que las óperas contienen, inicié analizando la narrativa visual capaz de atraer significativamente al público, y entonces ahí fue cuando decidí la creación de un personaje que íconizara a la niñez madurando, lista para dar el paso adelante, de ahí nació el personaje de L´Avidez, niñita cuya máxima meta en la vida es la de ser grande, amar al sistema y aliársele. El impulso que la niñita pondría de pretexto tendría que tener una conexión con el acto primero, así que tras la generación de una leyenda con los niños que interpretaron un juicio en el acto anterior. De ahí salió la historia de 15 niños que en un juicio contra un niño que quería ser niño fue juzgado y castigado, volviéndose así estos infantes consecuencia de un sistema de necesidad de la adultez, actuando inocente y violentamente a favor de quien admiran. Así, simbolizando a estos pequeños y su nueva iconografía con el número 15, se armó un atril de micrófono con la conjunción de 15 cráneos reales de puercos, representando las marginales mentes de los que aún no entendían, dejando su infantilidad sin entenderlo, al asesinar (posiblemente) realmente o (talvez) simbólicamente a quien no quería ser adulto, y era feliz con su estado de no crecido.
El segundo factor para la construcción de un espacio envolvente que hiciera que la perspectiva de la gente cambiara, insertándola en una fantasía en el interior de la mitología del conejillo, era la cuestión sonora, y en este caso interpretativa. El reto aquí tenía que ser la construcción sonora tanto en vivo (en escena) como todo lo que existía detrás de esta ( tanto en el nivel de la producción como en la idea y el concepto). La maduración como idea de la adquisición de un ajeno en la base de datos personal, la confrontación con la realidad, la corroboración del crecimiento y la asignación de un ideal, dejando de lado aquella capa de infantilidad innecesaria; así pues llegué a la conclusión de traspasar estos conceptos a construcción sonora.
Primeramente, para la adquisición de las ideas que motivan a la maduración llegué a la conclusión de crear una letra construida con estos fundamentos de la adquisición, por lo que la composición se basaba en la lectura de 100 términos de una palabra acerca de la maduración: Los 50 primeros los inventaría yo, desde mi punto de vista subjetivo, los siguientes 35 serían conseguidos por entrevistas a personas que yo conocía en mi vida diaria, y finalmente, los últimos 15 los conseguiría en yahoo respuestas, punto común de cuestionamiento, donde todos los que respondemos y preguntamos somos desconocidos los unos con los otros. Así, la letra de la canción iría de lo más cercano y personal a lo más lejano y desconocido.
Pero no solo la realización de esta composición crearían una ambientación fantástica y nueva, sino solo parecería un discurso y ya. Así que creé un patch en Max MSP, cuya función era primeramente la de la generación de una panoramización basada en ecos discontinuos con espacios y direcciones aleatorios; esto como creación espacial sonora, como un escenario. Pero eso no era suficiente para agregar el dramatismo de la adquisición de la idea, la posibilidad de negación, la confrontación con la idea que se avesima, esto debía de generarse primeramente en la interpretación, pero la interpretación no podía ser actuada, sino verdadera, sino carecería de coherencia con las acciones verídicas que se pretendían llevar a cabo. Finalmente uno de mis principales objetivos en mi caminar artístico es el de la cuestión de la frase de Picasso donde decía que el arte es una mentira, entonces yo me lo pregunto y lo debato con mis construcciones de veracidad. Para combatir con esto, el patch estaba construido para controlar efectos de saturación progresiva como el flanger y la granulación; así, cuando l´Avidez llegaba al término 50, un flanger era liberado lentamente, para que en el término 75, la granulación empezara y se fuera generando un ataque que la intérprete tendría que combatir para conservar su protagonismo dentro de la pieza, y con esto me refiero a que si ella quería seguir vigente, tendría que lucir más que el sonido que crecía a cada término, comenzando con la tierna voz de una niña ávida y terminando en gritos que confrontan al sonido ambientado, para al acabar en el número 100, el espacio sea interrumpido para dar muestra con este abrupto silencio, de que la maduración ha sido completada.
La pieza presentada en el festival de arte multimediático par-a-par, teniendo a Dalia Ybarra como intérprete de L´Avidez, siendo ésta un total éxito, la fuerza con la que la pieza fue dándose mantuvo a la audiencia fija los 10 minutos que ella tardó en llevarla a cabo, impresionando la fuerza con la que acompañó al sonido, detrás de una máscara de fieltro con la imagen caricaturesca de la pequeña personaje, para ser fuertemente aplaudida tras el poderoso silencio con el que la pieza termina.

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