3.2 La Gran Transformación

        3.2 La Gran Transformación

“No es la más fuerte de las especies la que sobrevive, tampoco la más inteligente sobrevive; Es aquella más adaptable al cambio”

 (Darwin, 1859)

Ya Kafka hablaba en La Metamorfosis del dolor que causaba padecer ser algo indeseable para Gregorio Samsa, “Gregorio sacó la conclusión de que su aspecto todavía le resultaba insoportable y continuaría pareciéndole”²⁵, de igual manera, al ser ascendiendo a su nueva forma de conejillo de indias, finalmente ha llegado al momento en el que será despojado de esa pesada capa de libertad innecesaria con la que nació; y es de eso mismo de lo que se trata ésta escena llena de intensidad y de emoción.

Y si el acto 3.2 es tratado a manera de clímax, puesto que ya por el puro concepto de transformación, se vuelve uno de los momentos más trágicos de la historia, y con esa palabra tan fuerte, como lo es Ascender, la gran transformación debía de parecer una metamorfosis que hiciera que la pieza total valiera la pena. Nunca pude sacar de mi cabeza la literalidad de esa palabra, así que para que la pieza pudiese ser realizada como yo lo necesitaba, fijé como condición que la pieza debía de ser realizada sobre un elevador en ascendencia, y para esto seleccioné la torre del CNA para que el proceso se llevara a cabo.

Comprendida por una cantante de ópera que basaría su interpretación en una serie de dibujos que un amigo artista de los Artistas Trabajando (Mario Hernández) realiza para la pieza a modo de partitura, y un baterista de heavy metal, a su vez, interpretaría el sentir de la cantante como instrucción para el desarrollo de su parte. Como el espacio de cualquier elevador es limitado, disminuí la población espectadora a tan solo 11 personas, más yo (para la documentación), más la cantante, más el baterista y su batería, más un anfitrión, que en este caso decidí que fuera la representación del wanabe, en forma de rata. Teniendo como personajes del performance a Cristóbal Gracia como La Rata Wanabe (que termina siendo una representación, un resumen visual de toda la actitud wanabe), Cesar Brito como El Latir (por el latido del corazón, la batería) y a Vianney Romero sustituyendo a la primera cantante (que a la mera hora deserta) como El Ser Ascendiendo (que representa a la transformación en sí misma). Los 11 visitantes, quienes son simbolismos de una sociedad feliz de la transformación y el paso a ser el conejillo, elegidos v.i.p. pasarían por una sección del lugar para ver proyectada la parte 3.1, y luego, la Rata los llevaría al piso donde cada uno abordaría el elevador cuando la pieza estuviese en marcha. El Latir y El Ser Ascendiendo subirían en el sótano y cada piso, ella iría exagerando mientras que un invitado sube por cada piso; al llegar a la cima de la torre, los intérpretes bajan de la cabina, y La Rata regresa a los invitados a su piso predeterminado. Los invitados estaban obligados a traer una cámara para grabar el evento, y pasar por el papel del sistema, del PSS y sus ojos intimidantes, y más específicamente a otros conejillos que le dan la bienvenida al ser, ahora que se vuelve uno más con ellos. Pero a pesar de la organización de la pieza, debido a las necesidades del espacio, ésta se retrasó demasiado por los trámites burocráticos para que el Cenart prestara el elevador de la Torre de Información, el cual era el perfecto para la realización. Luego de la participación en festivales como Statik, 90° o el mismo par-a-par, asumí que conseguir un elevador más en mi haber artístico no iba a ser ninguna dificultad, sin embargo, los requisitos que yo ponía era cerrarlo alrededor de dos horas para prepararse, así como contar con una persona de auxilio, de su gente de mantenimiento por lo que se requiriera, lo cual, la gente de la torre consideró riesgoso, por lo que las primeras cartas petitorias fueron rechazadas sin oportunidad de explicaciones o justificaciones creativas. Como el proyecto lo llevaba a cabo con el respaldo docente del profesor de multimedia Andrea Di Castro, él intercedió con la gente del Cenart consiguiendo unas semanas después el permiso solicitado. Calamidades como la presentada aquí, pueden evidenciar las dificultades que viven otras piezas cuyas complicaciones datan en burocracia y gente que no le interesan los porqués del arte, solo lo metódico, y con esto hago referencia esta vez a legendarias piezas gigantes como la del Wrapped Reichstag de Christo, en las que el proceso de librar los permisos y tabúes de la ignorancia llevó 24 años, de 1971 a 1995. En cuanto a conceptos y puntos referenciales en esta sección, a parte del Reichstag, puedo hacer mención nuevamente del Cremaster de Mathew Barney, pero específicamente en la parte donde se introduce a Dave Lombardo, baterista de la banda Slayer como parte de la composición de Cremaster 2, y a las aturdirdoras presentaciones vocales progresivas de artistas como Nina Hagen. La pieza se realizó exitosamente el 6 de Diciembre del 2008
“Cuando una gran transformación se realiza en la condición humana, trae consigo un cambio gradual en las ideas” (Taine, 1865)
Una vez la pieza del Ascenso ha sido concluida, las puertas del acto final son abiertas, el Aislamiento puede ser llevado a cabo, y a palabras de Fontellene “Cuando las cosas no quieren conformarse con nosotros, nosotros debemos conformarnos con ellas” (Fontellene, 1688), asentando, nunca renegando, siempre conformes.

“Nada es permanente a excepción del cambio” Heráclito